Hay personalidades que marcan una época e imprimen carácter a los acontecimientos históricos llegando a convertirse en protagonistas activos de muchos de ellos . Manuel Fraga Iribarne es uno de esos hombres que a través de sesenta años de servicio público y actividad política ha sabido ennoblecer su trabajo y convertirse en ejemplo vivo de ese concepto a veces tan poco entendido como es el patriotismo y el trabajo duro, con sus virtudes y defectos, aciertos y errores , pero siempre en una posición de responsabilidad y vanguardia .
Este hombre de impulso envidiable y categoría intelectual sobresaliente , este hombre nacido en Lugo en noviembre de 1922, catedrático de Derecho Político, embajador y diplomático, ministro de Información y Turismo entre 1962 y 1969 - autor de la Ley de Prensa de 1966, primer paso para el logro de la futura libertad de expresión - y de Gobernación en el primer Gobierno de la Monarquía, fundador del Partido Popular , ponente de la Constitución de 1978, jefe de la oposición de centro-derecha de 1982 a 1989, ha escrito más de ochenta libros y sobre él se han publicado doce biografías del más variado interés y ensayos del calibre del publicado en 2003 por el profesor Velarde Fueres : Fraga, o el intelectual y la política .
Este hombre, Manuel Fraga Iribarne, logró en 1989, como culminación de una brillante carrera política en la que sólo ha faltado - y es una injusticia histórica - la presidencia del Gobierno español, el gobierno de la Junta de Galicia. Durante el período 1989-2004 , bajo su mandato, Galicia se ha transformado de manera evidente con infraestructuras, equipamiento, expansión del turismo y riqueza.
Tras su paso por Galicia Fraga retornó a la política nacional ocupando un puesto en el Senado y cumpliendo su trabajo hasta el límite de sus fuerzas y hasta el final de sus días . El 15 de enero de 2012 , a los 89 año, Fraga fallecía en Madrid dejando el ejemplo de una obra fecunda , de una vida honrada, con sus aciertos y errores , como cualquier ser humano , pero con un bagaje impresionante que constituye un referente de primer orden para cuantos nos dedicamos a la esforzada y apasionante labor de la política .
Cuando una vida completa su ciclo y un hombre entrega sus horas, es difícil encontrar las palabras . Cada uno expresa sus recuerdos, los que le conocieron y trataron en profundidad, los que tuvieron el privilegio de trabajar a sus ordenes en las diferentes administraciones y responsabilidades , los que – finalmente – han seguido su carrera que atraviesa varias generaciones y muy diferentes escenarios políticos y pueden juzgar sus logros , su bagaje final .
Manuel Fraga desarrolló su punto de vista político en multitud de libros , muchos de ellos de gran contenido político y jurídico . Y expresó sus memorias llenas de datos, hechos y resultados en los volúmenes de Memoria breve de una vida pública . Por encima de aciertos y errores, de avatares políticos diversos y sometidos a polémica y debates, lo cierto es que Fraga ha protagonizado una serie de núcleos fundamentales en la vida política del ultimo siglo en España : el compromiso con una política de hechos, reformas y resultados muy visible en sus años de gobierno tanto en el Gobierno de la nación como en la Junta de Galicia , la construcción de un gran partido moderno, democrático, conservador y reformista como es el Partido Popular, nacido en circunstancias muy complicadas, con una larga travesía por el desierto en su historia y hoy convertido en el partido político más numeroso e importante de Europa . Pero a todo ello hay que añadir en el nivel más propiamente personal una honradez absoluta, un carisma considerable y una capacidad intelectual sin parangón en las últimas décadas .
Manuel Fraga trabajó por su país y por aquello en lo que creía, con vocación de servidor público en el más noble sentido del término , hasta el ultimo día de su larga y fecunda existencia . Y para los que trabajamos en esa brecha , tantas veces ingrata y otras tantas maravillosa, ese legado es nuestro mejor compromiso, y nuestro reto más importante : cumplir con nuestro deber , ejercer nuestra vocación de servicio y ayudar a mejorar las condiciones de vida de quienes nos rodean .
Descanse en paz, Don Manuel Fraga Iribarne , político, intelectual y hombre de honor y de fe .